COMO PREVENIR EL FOTOENVEJECIMIENTO EN VERANO
Anticípate y prepara tu piel para prevenir el fotoenvejecimiento en verano
Con la llegada del verano los rayos solares y su radiación son mayores por lo que la epidermis sufre una mayor agresión, la piel sufre un fotoenvejecimiento mayor y con ello aceleramos el envejecimiento cronológico de la piel.
Todos queremos lucir un perfecto bronceado, con una piel luminosa, un tono uniforme, sin machas, … pero pasamos de las agresiones que sufre nuestro rostro durante el invierno a exponerlo a otras iguales o mayores.
Pero cuando más debemos prevenir el fotoenvejecimiento es en verano justo cuando más voy a exponer mi piel a las tomas de sol.
Es sumamente importante cuidar nuestra piel durante todo el año y en primavera, antes del verano, fortalecerla y tratarla no solo para que broncee correctamente sino para que no nos encontremos con los efectos poco deseados de una sobreexposición solar.
Para comenzar lo que debemos de hacer es una limpieza facial, hoy en día no es necesario “sufrir” las limpiezas con extracción ya que existe una variedad de tratamientos como la microdermoabrasión, el peeling ultrasónico o el Hidralift que además de realizar una limpieza produce una exfoliación de la capa cornea, estimulando la regeneración celular. También podemos realizar tratamiento con AHA y BHA que regeneran e hidratan nuestra piel.
La hidratación es sumamente importante, uno de los síntomas del fotoenvenjecimiento es la deshidratación facial, debemos de aportar agua a nuestra piel, un tratamiento con ácido hialurónico no reticulado ya sea de uso tópico (alto peso molecular) o de aplicación con el Hyaluron pen (bajo peso molecular) aportara a nuestra piel jugosidad e hidratación.
Debemos de tratar la célula fundamental de la dermis, el fibroblasto, este se encarga del mantenimiento de la matriz extracelular y de la síntesis de colágeno y elastina, con técnicas como la diatermia por radiofrecuencia o el HIFU que no solo contraemos el colágeno existente, sino que estimulamos el propio fibroblasto induciendo la neocolagenesis.
No nos podemos olvidar de uno de nuestros mayores enemigos, el radical libre, el sol es un gran productor de radicales libres nuestro organismo no es capaz de generar tantos antioxidantes como para neutralizarlo, es por ello que debemos de aportar antioxidantes y antirradicales libres, con la diatermia por radiofrecuencia 448KHz recuperamos la homeostasis de los tejidos, el HIFU estimula las proteínas de choque térmico y con el Hyaluron podemos introducir cocteles de vitaminas y antioxidantes.
Uno de los cuidados que nunca debemos olvidar es la protección solar adecuada a tu fototipo y reponiendo tantas veces como sea necesario, nos ayudara a evitar uno de los efectos más visibles del fotoenvejecimiento, las manchas solares, que durante el resto del año podemos tratar con láser, IPL o peeling químico, pero durante el verano debemos evitar su tratamiento.
Cuida tu piel para el verano y lúcela durante todo el año.
Déjate Crecerte Bien.